Alguna vez han pensado???...

No, no es afán de ofender, pero ¿Alguna vez han pensado?...

Hará no muchos meses en algún post que alguien me regaló en el Blog amigo de Jorgito Speedy, un lector molesto me conminaba a que un relato de aproximadamente ‑paginas más, paginas menos-, unas sesenta cuartillas tamaño carta de Word, no lo hiciera yo tan extenso y que de inmediatas maneras entrara yo al detalle jugoso  que a él le interesaba leer.

Y recuerdo que tal vez de forma un tanto petulante yo le contesté que entonces con gusto le enviaría en dos o tres líneas la versión resumida de toda aquella historia para que así él tuviera colmados sus antojos de leer algo de literatura porno express.  Quedando entonces el relato mas o menos detallado de la siguiente manera :

“ Había una vez una señora muy guapa que siendo mujer  felizmente casada y prohibida , un día cayó en las garras de un hombre que sin importarle que ella fuese la esposa de otro, con engaños y falsas promesas la sedujo, convirtiéndola así en una madre casada y adultera.”...

El asunto es éste:

Reconozco que muy a menudo funciona aquel dicho de que “menos es más” y de esa forma existen escritores que sin tener que entrar a la minucia del detalle, dan geniales pinceladas en cada renglón de su prosa, consiguiendo finalmente en pocas páginas lograr grandes y entretenidas escenas...

Pero...    ( Casi siempre hay un pero  )   ( Conjunción Adversativa  según la RAE )

Pero...  Insisto.

Alguna vez han pensado que la gran mayoría de las cosas que vemos ya sea en la  televisión, el cine, en el teatro o hasta pequeñas producciones  ahora hechas para el You Tube o algo del porno no Gonzo,  llevan detrás y de manera curiosamente “invisible” cientos y cientos de páginas, dibujos, y líneas y más líneas de diálogos , correcciones , anotaciones e investigaciones pertinentes para poder llevar a cabo la realización de los mismos.  Pues por supuesto que antes que visto en imágen, todo lo que vemos antes fue escrito, de la misma manera en que como ejemplo les pongo el caso de alguna comedia en la que hasta lo que parece casual, y en la mayoría de los casos -en apariencia-  accidental está estudiado para hacer que una simple pausa ocasione el efecto de hilaridad en el publico.

Es esto un caso curiosa y trágicamente injusto que constantemente sucede en el arte o los procesos creativos  que vistos a traves de los ojos del espectador, a menudo resultan  ser devorados  de un sólo bocado por la sociedad moderna cada vez mas acostumbrada a no tener que acordarse de nada,  pues hasta para eso están ya  los teléfonos con  agendas para recordar los cumpleaños,  mismos  teléfonos de nuestros conocidos,  de entre los cuales reconozco que antes habiendo sido mi cabecita una pequeña enciclopedia y directorio neuronal , ahora ni el de mi propio hijo me sé - ya que ahora eso es lo más habitual y nunca sabemos cuando se nos llega a perder el dichoso aparato-.

De tal manera sucede esto que les comento, que a menudo el trabajo de largas horas de acariciar , corregir y sobar el papel haciendo un  dibujo, un espectador  no le dedica más allá de tres o cuatro segundos para verlo y decidir que le resulta aburrido  ya continuar viéndolo antes de apresurarse a pasar a lo que le sigue.

Así como en las creaciones gráficas, en la escritura sucede algo parecido aunque inverso a la vez pues tomando como ejemplo algo de lo que recientemente he escrito, me doy cuenta que a veces sucede que  un escena que de forma continua, debería de transcurrir en no mas de cinco minutos, y en ocasiones en menos de simples instantes, para leerse , requiere que se tome el lector la dedicación de quince a veinte minutos para poder leerla como se tuvo planeada y en caso de la de menor espacio de tiempo,  constantemente también sucede que toma mas de tres o cuatro párrafos para poder describir aquellos breves instantes.

Pero descuiden, que si eso les parece mucho consideren que frecuentemente ese tipo de escenas  y “evocaciones” consumen a quienes la escriben, mas de  cinco o seis horas, a veces días, leídas, releídas, investigación y vuelta a planear la correcta redacción que pueda llegar a tener algún párrafo pensado para que en la cabeza del lector pudiese llegar a crearse el pretendido impacto, que lo haga poder llegar a imaginarse a si mismo inmerso en la escena.

En  concreto les digo que a veces ni siquiera imaginar una serie de circunstancias que se presenten en las vidas  de los protagonistas de manera creíble para el lector constituye un problema  para quien escribe pues como a mi me ha sucedido en el plan personal o de confidente de algunos lectores y amigos que me han contado sus vidas, muy a menudo ocurre que la realidad supera con creces a la fantasía, al grado tal que existen anécdotas personales que nunca he querido escribir por que de seguro quien las leyera, diría:

No, ¡no inventes eso no te lo creo!...

Así pues, terminando ya el punto motivo de esta entrada, respetuosamente y ya sin sarcasmos comento que a quien de veras le de  flojera  leer pero tenga ganas de saciar sus ansias de algo sugerente y prohibido, mejor se haga asiduo al porno visual, pues definitivamente es de recompensa mas inmediata, se puede adelantar, congelar y regresar pronto la imagen, en vez de perder  tiempo salteando entre los renglones en busca de las palabras clave que nos hagan decir...

“Ah vaya, ¡por fin!....  parece que ya se va a poner bueno...

Ludo M.

PD: Reconozco que  a mi me sucede algo parecido , siendo que salvo por algunas escenas de Jorgito y ahora recientemente Ragnas y Rebelde Buey hace años que no leo nada en español que me haya atrapado o al menos sugerido que  podría llegar a gustarme  como aun frecuentemente me sucede con los que yo considero que son los “clásicos de la lengua sajona”,  a quienes no por copia si no por mera coincidencia en el gusto por los mismos estilos a veces temo leer, pues aunque son relatos extensos resultan tan deliciosamente románticos, detallados y evocadores que le ocasionan a uno desvelos y ganas de poder leer a cuenta gotas cada una de sus escenas.

Lamentablemente cuando repaso en tales autores e doy cuenta que a veces aun siendo  magníficos, puede ser que solo sea conveniente haberlos leído una vez en la vida.

Mi pregunta a todo aquel que haya llegado a leer hasta el final de este post , seria la siguiente.   En caso de alguno de mis relatos que te hayan gustado  ( o los de algún otro autor., tú acostumbras a volver a leerlos mas de una vez??   ( yo antes lo hacía )